El amanecer de hoy se tiñe de un rojo distinto, color que irá ocupando un lugar privilegiado en cada rincón de nuestro globo terráqueo, adoptando la forma de lazo solidario. Este lazo simboliza a nivel mundial la solidaridad con las personas enfermas de SIDA y los infectados por el VIH (virus de inmunodeficiencia humana).
Al margen de que diariamente muchas personas porten ese lazo con la significación que entraña, cada 1 de diciembre se rinde un homenaje mundial a los fallecidos por la enfermedad del SIDA y a concienciar a la sociedad de la necesidad de aunar esfuerzos en la lucha por erradicar el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), con la conmemoración del Día Mundial de la lucha contra el SIDA, como resultado de la decisión adoptada, por unanimidad, en la Cumbre Mundial de Ministerios de Sanidad, celebrada en Londres en enero de 1988, donde se eligió tal fecha debido a que el primer caso de SIDA fue diagnosticado en este día en el año 1981.
Tal vez son muchas las personas que desconozcan el por qué de un lazo rojo como emblema, pero todo radica en una costumbre estadounidense de honrar y recordar a los fallecidos con una cinta atada a un árbol, a la vez que una muestra de amor y afecto por las personas desaparecidas, así como tal vez somos muchos los que ignoramos que, desde el 1 de diciembre de 1981, el SIDA se ha cobrado la vida de más de 25 millones de personas en todo el mundo y que más de 39 millones de personas viven con VIH/SIDA.
Año tras año, cuando se aproxima esta fecha, se produce una proliferación de información periodística, publicitaria, eventos de difusión y prevención, y, por suerte, la toma de conciencia de la sociedad, en general, sobre ella. Sin embargo, se sigue observando la escasa disminución del contagio de esta enfermedad, por lo que, desde todos los frentes, se ha optado por una estrategia encaminada a insistir en las medidas que ayudan a no contraer el virus y a la mayor difusión de la información disponible públicamente, al enfrentarnos a una de las epidemias más destructivas de la historia registrada.
Como suma a esa estrategia, nunca está de más un recordatorio sobre medidas de prevención del contagio del VIH, toda vez que esta enfermedad ha dejado de ser un problema que afectaba predominantemente a los grupos de alto riesgo para convertirse en una epidemia que repercute en la población en general y sin excepción:
- Emplear siempre un preservativo durante relaciones sexuales con penetración vaginal, anal u oral (al margen de otras cuestiones), toda vez que la presencia de lesiones sangrantes en boca, órgano genital, mucosa anal o vaginal, aumentan considerablemente el riesgo de contagio, o, en su caso, practicar la abstinencia (no entraré en más profundidad).
- Evitar el uso compartido de agujas, jeringuillas o instrumentos contaminados, en especial, de cuidado personal, debiendo emplearse por los consumidores de drogas una nueva aguja u otra debidamente esterilizada para cada inyección.
- Empleo de guantes de látex y lavado frecuente de las manos por parte de profesionales que deban tratar a enfermos de SIDA.
Por tanto, nuestra lucha debe iniciarse en la concienciación de nuestro ámbito más próximo sobre esas medidas a fin de lograr que las cifras de personas infectadas muestren un descenso, y continuar en la línea de exigir una bajada de precios de las medicinas empleadas para combatir sus síntomas, así como que todos los enfermos tengan acceso a los mismos, porque pensemos que nosotros podríamos estar en su lugar y ellos viviendo en nuestro hogar.
A este paso, no quedarán días en el calendario para instaurar un día más de lucha contra alguno de los múltiples males que asolan a este planeta y que, por desgracia, no debemos olvidar que éstos sólo quedan en las imágenes televisivas, sino que los podemos palpar muy cercanos.
“…The letter arrives like a bolt from the blue.. so what's left of your lives... all your dreams lost to you... Say it's not true... Say it today... When I open my eyes... will it all go away... Say it's not true... Say it for real... can't be happened to you... can't be happened to me... It's hard not to cry... It's hard to believe... so much heartache and pain... so much reason to grieve... with the wonders of science... all the knowledge we've stored... magic cocktails for lives... people just can't afford.. Say it's not true... you can say it's not right... It's hard to believe.. the size of the crime…” (“Say it's not true” de Queen)
Al margen de que diariamente muchas personas porten ese lazo con la significación que entraña, cada 1 de diciembre se rinde un homenaje mundial a los fallecidos por la enfermedad del SIDA y a concienciar a la sociedad de la necesidad de aunar esfuerzos en la lucha por erradicar el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), con la conmemoración del Día Mundial de la lucha contra el SIDA, como resultado de la decisión adoptada, por unanimidad, en la Cumbre Mundial de Ministerios de Sanidad, celebrada en Londres en enero de 1988, donde se eligió tal fecha debido a que el primer caso de SIDA fue diagnosticado en este día en el año 1981.
Tal vez son muchas las personas que desconozcan el por qué de un lazo rojo como emblema, pero todo radica en una costumbre estadounidense de honrar y recordar a los fallecidos con una cinta atada a un árbol, a la vez que una muestra de amor y afecto por las personas desaparecidas, así como tal vez somos muchos los que ignoramos que, desde el 1 de diciembre de 1981, el SIDA se ha cobrado la vida de más de 25 millones de personas en todo el mundo y que más de 39 millones de personas viven con VIH/SIDA.
Año tras año, cuando se aproxima esta fecha, se produce una proliferación de información periodística, publicitaria, eventos de difusión y prevención, y, por suerte, la toma de conciencia de la sociedad, en general, sobre ella. Sin embargo, se sigue observando la escasa disminución del contagio de esta enfermedad, por lo que, desde todos los frentes, se ha optado por una estrategia encaminada a insistir en las medidas que ayudan a no contraer el virus y a la mayor difusión de la información disponible públicamente, al enfrentarnos a una de las epidemias más destructivas de la historia registrada.
Como suma a esa estrategia, nunca está de más un recordatorio sobre medidas de prevención del contagio del VIH, toda vez que esta enfermedad ha dejado de ser un problema que afectaba predominantemente a los grupos de alto riesgo para convertirse en una epidemia que repercute en la población en general y sin excepción:
- Emplear siempre un preservativo durante relaciones sexuales con penetración vaginal, anal u oral (al margen de otras cuestiones), toda vez que la presencia de lesiones sangrantes en boca, órgano genital, mucosa anal o vaginal, aumentan considerablemente el riesgo de contagio, o, en su caso, practicar la abstinencia (no entraré en más profundidad).
- Evitar el uso compartido de agujas, jeringuillas o instrumentos contaminados, en especial, de cuidado personal, debiendo emplearse por los consumidores de drogas una nueva aguja u otra debidamente esterilizada para cada inyección.
- Empleo de guantes de látex y lavado frecuente de las manos por parte de profesionales que deban tratar a enfermos de SIDA.
Por tanto, nuestra lucha debe iniciarse en la concienciación de nuestro ámbito más próximo sobre esas medidas a fin de lograr que las cifras de personas infectadas muestren un descenso, y continuar en la línea de exigir una bajada de precios de las medicinas empleadas para combatir sus síntomas, así como que todos los enfermos tengan acceso a los mismos, porque pensemos que nosotros podríamos estar en su lugar y ellos viviendo en nuestro hogar.
A este paso, no quedarán días en el calendario para instaurar un día más de lucha contra alguno de los múltiples males que asolan a este planeta y que, por desgracia, no debemos olvidar que éstos sólo quedan en las imágenes televisivas, sino que los podemos palpar muy cercanos.
“…The letter arrives like a bolt from the blue.. so what's left of your lives... all your dreams lost to you... Say it's not true... Say it today... When I open my eyes... will it all go away... Say it's not true... Say it for real... can't be happened to you... can't be happened to me... It's hard not to cry... It's hard to believe... so much heartache and pain... so much reason to grieve... with the wonders of science... all the knowledge we've stored... magic cocktails for lives... people just can't afford.. Say it's not true... you can say it's not right... It's hard to believe.. the size of the crime…” (“Say it's not true” de Queen)
1 comentario:
Lei con mucha atencion lo que escribiste, realmente creo que es como vos decís. Me gustaria agregar tambien que hasta que las grandes multinacionales que fabrican las drogas para este virus no sean de algun modo frenadas, la radicadion del virus no va a ser posible del todo.
Tratemos de tomar conciencia y de ponernos un poquito en el lugar de los que la están suefriendo.
Te dejo muchos saludos desde Argentina, espero si gustas que te pases por mi blog
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